El entorno en el que se practica Beach Functional Training no es simplemente un fondo incidental, sino un componente activo y esencial del entrenamiento. La arena, elemento central de este entorno, ofrece características únicas que transforman cualquier rutina de ejercicios en una experiencia completamente distinta y desafiante.

Inestabilidad Natural

La arena es una superficie inestable que desafía constantemente el equilibrio y la estabilidad del cuerpo. Este desafío constante activa músculos que a menudo no se utilizan en superficies sólidas y estables. La necesidad de mantener el equilibrio y la estabilidad mejora significativamente la fuerza del núcleo y la coordinación general.

Resistencia Adicional

Caminar o correr en arena requiere un mayor esfuerzo que en superficies duras, debido a la resistencia que la arena ofrece. Cada paso es más demandante, lo que aumenta la intensidad del entrenamiento cardiovascular y promueve un mayor gasto calórico.

Bajo Impacto

A pesar de su desafío, la arena proporciona una superficie de bajo impacto que es más amable con las articulaciones en comparación con el asfalto o el concreto. Esto la hace ideal para personas en recuperación de lesiones o para aquellos que buscan minimizar el estrés en sus articulaciones mientras entrenan.

Conexión con la Naturaleza

Entrenar en un entorno natural como la playa permite una conexión directa con la naturaleza, lo que puede tener efectos terapéuticos y revitalizantes. La exposición al aire libre y el sonido del mar pueden mejorar el estado de ánimo y reducir los niveles de estrés, fomentando una experiencia de entrenamiento más placentera y beneficiosa mentalmente.

Diversidad de Entrenamientos

El entorno natural ofrece variabilidad y flexibilidad en los tipos de entrenamiento. Se pueden realizar desde ejercicios de alta intensidad hasta sesiones de yoga al amanecer, adaptándose a diferentes necesidades y objetivos de entrenamiento. Esta diversidad mantiene las rutinas frescas e interesantes, aumentando la motivación y el compromiso con el ejercicio regular.

Estudios relacionados

El entrenamiento en la arena tiene varias ventajas en comparación con el entrenamiento en superficies firmes, según diversos estudios científicos:

Consumo de Energía

Correr en la arena requiere aproximadamente 1.2 a 1.6 veces más energía que correr en una superficie firme. Esto se debe a la inestabilidad y la mayor resistencia de la arena, que obliga a los músculos de las piernas a trabajar más para estabilizar el cuerpo​ (Frontiers)​​ (EliteFTS)​.

Adaptaciones Neuromusculares

Un estudio sobre jugadores de balonmano junior mostró que el entrenamiento pliométrico en arena resultó en mejoras significativas en la velocidad y agilidad en comparación con un grupo que entrenó en una superficie firme. Los tiempos de cambio de dirección y las pruebas de velocidad mostraron mejoras notables en el grupo que entrenó en arena​ (BioMed Central)​.

El entrenamiento en arena aumenta la activación de los músculos distales de las extremidades inferiores y mejora el rango de movimiento de las caderas y rodillas. Esto se traduce en un fortalecimiento general de los músculos de los pies y tobillos​ (Frontiers)​.

En un estudio con jugadores de fútbol de playa, se observó que el rendimiento en sprint y otros parámetros de rendimiento físico mejoraron significativamente cuando se entrenaba en arena en comparación con superficies firmes​ (Frontiers)​.

Rendimiento en Saltos

Un estudio con jugadoras de voleibol femenino encontró que el entrenamiento pliométrico en arena mejoró significativamente la fuerza y la resistencia cardiovascular en comparación con el entrenamiento en una superficie rígida. La altura del salto y la fuerza pico también mostraron mejoras en el grupo que entrenó en arena​ (MDPI)​.

En jugadores de baloncesto, el entrenamiento en arena mejoró la capacidad de cambio de dirección, la velocidad de sprint y la altura de los saltos en comparación con los que entrenaron en una superficie dura​ (MDPI)​.

Prevención de Lesiones

La superficie blanda y absorbente de la arena reduce el impacto en las articulaciones, lo que puede disminuir el riesgo de lesiones relacionadas con el entrenamiento de alta intensidad. Este beneficio es especialmente útil para actividades como correr y saltar, donde la fuerza de impacto es considerablemente mayor en superficies duras​ (EliteFTS)​.

Activación Muscular

Correr y entrenar en la arena incrementa la activación de los músculos distales de las extremidades inferiores y mejora el rango de movimiento de las caderas y rodillas. Esto se traduce en un fortalecimiento general de los músculos de los pies y tobillos, lo que puede ser beneficioso para individuos con problemas de sobre pronación​ (Frontiers)​.

Eficiencia del Movimiento

Aunque la eficiencia mecánica puede ser menor debido a la menor reutilización de energía elástica y el deslizamiento del pie en la arena, los beneficios a nivel neuromuscular y cardiovascular pueden compensar estas diferencias, ofreciendo una forma de entrenamiento más completa y desafiante​ (Frontiers)​​ (MDPI)​.